
Afiliados | 16 de julio
Salario promedio en Argentina cae a mínimos históricos: el país con el sueldo pretendido más bajo de la región

Argentina se posiciona como el país con el salario pretendido más bajo de América Latina, con un promedio mensual de 717 dólares MEP, según un informe de la agencia Bumeran. Este dato refleja la continua erosión del salario real en el país, exacerbada por la devaluación de la moneda que siguió a la asunción del gobierno de Javier Milei en diciembre pasado. La devaluación impactó especialmente en los dólares financieros, mientras el tipo de cambio oficial se mantuvo cuasicongelado, situando el sueldo pretendido en 975 dólares si se mide en esta última moneda.
La devaluación del 118% en diciembre, que pulverizó los salarios, fue parte de una transferencia de ingresos desde la clase trabajadora, acentuando la crisis en el poder adquisitivo. Aunque en el primer semestre de 2024 se observó una recuperación en los salarios, tanto en dólares oficiales como en dólares MEP, esta mejoría se dio desde un piso extremadamente bajo.
Comparativamente, otros países de la región presentan sueldos pretendidos más altos: Chile lidera con 1.155 dólares mensuales, seguido de Panamá con 1.020 dólares. Perú y Ecuador completan el ranking con 840 y 832 dólares, respectivamente.
El informe también destaca que Argentina tiene una de las brechas salariales por género más amplias de la región, con un promedio histórico del 15,7%. Aunque en el último tiempo esta brecha se redujo al 4,9%, sigue siendo significativa, superada solo por Panamá con un 3,99%.
Por ocupación laboral, los salarios pretendidos en Argentina muestran disparidades significativas. En el sector de tecnología y sistemas, un puesto junior aspira a 536 dólares MEP, mientras un supervisor alcanza los 863 dólares. En administración y finanzas, los sueldos van desde 534 dólares MEP en posiciones de entrada hasta 1.065 dólares para roles más altos. En producción, abastecimiento y logística, las remuneraciones oscilan entre 514 y 1.046 dólares MEP, dependiendo del nivel de responsabilidad.
Este panorama resalta las graves dificultades económicas que enfrentan los trabajadores en Argentina, en un contexto de inestabilidad política y económica que continúa afectando profundamente el mercado laboral.