
Política | 22 de agosto
De cara a las elecciones, el peronismo ortodoxo de Quilmes impulsa a Alejandro Poli como figura emergente

En medio de las especulaciones y movimientos preliminares de cara a las elecciones de medio término en la provincia de Buenos Aires, el peronismo de Quilmes comienza a reordenarse y a mostrar señales de reactivación política. Con el calendario electoral confirmado —elecciones desdobladas en septiembre y octubre—, distintos sectores comienzan a posicionar a sus referentes.
Uno de los primeros en mover fichas fue el exintendente Sergio Villordo, quien anunció públicamente su respaldo a Alejandro Poli, secretario general de la Federación de Remiseros (FAREM), y figura de larga trayectoria en el ámbito gremial y político local. El gesto fue visible en un acto reciente en el que se lo vio a Poli sobre un escenario acompañado por un cartel con la consigna “Alejandro Poli 2025”, lo que dejó en claro la intención de proyectarlo como candidato.
A través de sus redes sociales, Villordo sostuvo que “el recambio político es un proceso natural y necesario en todo sistema democrático”, en alusión a la necesidad de renovar liderazgos dentro del movimiento peronista. “Este proceso puede traer tanto oportunidades como desafíos, pero es clave para la evolución institucional y política de nuestro país”, señaló en su publicación.
La jugada busca instalar a Poli como una alternativa del peronismo ortodoxo frente a la actual conducción local del distrito, encabezada por la intendenta Mayra Mendoza, referente de La Cámpora. En ese sentido, ya comenzaron a aparecer pintadas en distintos puntos de Quilmes con el nombre del dirigente sindical, en lo que se interpreta como un anticipo de la campaña.
Con este respaldo, Alejandro Poli se posiciona como uno de los primeros nombres propios en sonar dentro del armado quilmeño, marcando el inicio de un proceso de alineamientos y tensiones internas que promete escalar a medida que se acerque el cierre de listas.