Sindicatos de Córdoba pertenecientes a todas las centrales obreras se movilizaron este miércoles hacia la Legislatura provincial para expresar su rechazo a la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional, advertir sobre el deterioro de la industria y manifestar su oposición al incremento de los aportes a la Caja de Jubilaciones que propone el Ejecutivo provincial.

La marcha fue encabezada por la Mesa Sindical de la Industria, el Trabajo y la Soberanía, junto a gremios estatales y organizaciones sociales. Las organizaciones convocantes señalaron que el objetivo fue “defender los derechos conquistados” y advertir que no acompañarán iniciativas que afecten la estructura sindical o promuevan retrocesos en materia laboral. Además, llamaron a los legisladores provinciales a no votar medidas que, afirmaron, “perjudiquen a las y los trabajadores”.

En ese marco, también cuestionaron la decisión del Gobierno de Córdoba de aumentar los aportes personales de trabajadores y trabajadoras estatales. Según denunciaron, la medida “traslada el peso del ajuste a los salarios” y busca compensar un déficit que, aseguraron, deriva de “gestiones oficiales y políticas que precarizan el empleo público”.

Discursos y posicionamiento

Durante el acto, expusieron Ezequiel Morcillo (Bancarios), Ilda Bustos (Gráficos), Rubén Daniele (Municipales de Córdoba), Federico Cortelletti (Judiciales) y Rubén Urbano (UOM). Los dirigentes cuestionaron “las reformas elaboradas en beneficio de los sectores económicos concentrados” y ratificaron la continuidad de acciones conjuntas para enfrentar los proyectos que consideran regresivos.

En un documento consensuado, las organizaciones expresaron su “orgullo por la historia de lucha de las trabajadoras y los trabajadores argentinos”, y recordaron que los principales derechos laborales “se conquistaron con organización y presencia en la calle, además de los ámbitos formales de negociación”.

También remarcaron que “la primera reforma necesaria es la inclusión de los millones de trabajadores no registrados”, y afirmaron que la Argentina “tiene los recursos para construir un país con empleo digno y con derechos”, en contraposición a modelos que —sostuvieron— concentran beneficios en pocos sectores.

El texto concluye con una defensa de los convenios colectivos de trabajo, la reducción de la jornada laboral, la negociación por rama de actividad, un salario mínimo que cubra necesidades básicas y el acceso a información empresarial e indemnizaciones. “No abandonamos la lucha. No nos hemos resignado ni nos han vencido”, finaliza el documento.