El ministro de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, Walter Correa, reiteró sus críticas al proyecto de reforma laboral impulsado por el Gobierno nacional y sostuvo que las medidas propuestas representan “una retracción en términos de derechos y en términos democráticos”.

En declaraciones radiales, el funcionario afirmó que, desde su mirada política, las reformas buscan “insertar al país en una colonia yanqui” y representan “un regreso al preperonismo, cuando los trabajadores no tenían ni conquistas ni derechos”. “Como militante peronista, soy claro en mi posición cuando veo una incidencia de soberanía monetaria por parte del Fondo Monetario Internacional y del Tesoro de Estados Unidos. Por eso digo que nos están llevando a una neocolonia”, expresó.

Pese a su postura crítica, Correa reconoció que hay aspectos del régimen laboral vigente que podrían revisarse, aunque advirtió que cualquier debate debe darse “en el marco de la realidad actual”. En esa línea, cuestionó que desde la administración nacional “se desconozca el contexto local y mundial en el que se están implementando regímenes que tienden hacia la modernidad”.

“Esto no es modernidad —sostuvo—; es un retroceso”.

El titular de la cartera laboral bonaerense también se refirió a la posibilidad de ampliar la jornada laboral a 13 o 14 horas, tema que se mencionó en el marco de la discusión nacional. “Habría que analizar, desde la salud mental y física, qué implica trabajar tantas horas. No se puede hablar tan a la ligera de una jornada de 13 horas. Requiere un abordaje profesional y mucho más profundo”, advirtió.

Correa señaló además que, en estos dos años de gestión del presidente Javier Milei, se implementó “una clara política en contra de la industria nacional y del trabajo”, lo que —según afirmó— provocó “miles de despidos” y una creciente incertidumbre en las familias trabajadoras. “Ese contexto genera de hecho una flexibilización laboral, porque la necesidad de conseguir empleo para alimentar a la familia es imperiosa”, concluyó.