Domingo 7 de Diciembre de 2025

Afiliados | 07 de diciembre

Una familia necesitó casi $1,2 millones en septiembre para no ser pobre, según datos del INDEC

La inflación continúa golpeando el poder adquisitivo: en septiembre, una familia tipo debió reunir $1.176.852 para no caer por debajo de la línea de pobreza, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

El relevamiento indica que una pareja con dos hijos precisó ese monto para cubrir los bienes y servicios básicos comprendidos en la Canasta Básica Total (CBT), mientras que el gasto necesario para no caer en la indigencia —la Canasta Básica Alimentaria (CBA)— fue de $527.736.

Subas moderadas, pero la crisis salarial persiste

En comparación con agosto, ambas canastas mostraron un aumento del 1,4%, una variación menor al 2,1% de inflación general registrada ese mes. Sin embargo, en la comparación anual, la CBT creció 22% frente a septiembre de 2024, y acumula una suba del 14,9% en lo que va de 2025.

Por su parte, la CBA —que mide únicamente los alimentos esenciales— tuvo un incremento interanual del 23,1%, y del 17,5% entre enero y septiembre.

Aunque los aumentos de las canastas estuvieron por debajo del promedio inflacionario, los salarios continúan sin recuperar el terreno perdido. En términos reales, la mayoría de los trabajadores necesita más de un millón de pesos por mes para no ser considerados pobres, una cifra impensada apenas un año atrás.

El costo de vida según el tamaño del hogar

De acuerdo con el informe oficial, los valores de las canastas básicas varían según la cantidad de integrantes del hogar:

  • Un hogar de tres personas requirió $936.911 para no ser pobre y $420.140 para cubrir los alimentos básicos.

  • Una familia tipo de cuatro integrantes necesitó $1.176.852 (CBT) y $527.736 (CBA).

  • En tanto, un hogar de cinco miembros debió disponer de $1.237.789 para cubrir la CBT y $555.063 para la CBA.

Inflación y deterioro social

Pese a la leve desaceleración del índice de precios, el incremento constante del costo de vida mantiene bajo presión a los sectores asalariados, jubilados y monotributistas. Según analistas, la brecha entre ingresos y canasta básica continúa ampliándose, lo que agrava los niveles de pobreza e indigencia en el país.

 

La situación refleja el impacto de la recesión y el estancamiento salarial en medio del ajuste fiscal del Gobierno nacional. Con estos valores, el umbral de pobreza se consolida por encima del millón de pesos mensuales, marcando un nuevo récord histórico.

COMENTARIOS