
Gremiales | 04 de mayo
Fallo inédito: la Justicia anuló un despido con causa por falta de claridad en la comunicación

En un caso sin precedentes recientes, la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo anuló un despido con causa por deficiencias formales y sustanciales en la notificación. El hecho tuvo lugar en una estación de servicio, donde un operario fue desvinculado bajo acusaciones graves que, según la Justicia, no fueron suficientemente fundamentadas ni probadas.
La empresa había comunicado la decisión mediante una carta documento en la que enumeraba una serie de conductas como “negligente accionar”, “violencia con su superior”, “poca contracción al trabajo”, “negativa a prestar tareas” y “persistencia en llegadas tardes”. A juicio de la empleadora, estos hechos constituían una “severa injuria” que justificaba el despido directo y sin indemnización.
Una notificación sin sustento concreto
Sin embargo, el tribunal determinó que la comunicación del despido no cumplía con lo establecido en el artículo 243 de la Ley de Contrato de Trabajo (LCT), que exige que toda rescisión del vínculo laboral con causa sea comunicada por escrito, con expresión clara y precisa de los motivos.
Lejos de ser un simple requisito formal, esta norma es considerada por la Justicia como una garantía esencial para que el trabajador pueda ejercer su derecho de defensa. En este caso, las expresiones genéricas y sin detalles, como “negligencia” o “violencia”, no fueron acompañadas por hechos concretos ni fechas, ni tampoco por pruebas documentales o testimoniales.
De hecho, la empresa desistió de la prueba testimonial que había ofrecido y no presentó elementos que acreditaran sus acusaciones. Esto debilitó aún más su posición frente a la Justicia laboral, que resolvió en favor del trabajador.
Precedente con impacto para el mundo del trabajo
“La omisión de una exposición clara, precisa y circunstanciada de los hechos imputados al trabajador impide considerar configurado un despido con causa”, sentenció la Cámara. En consecuencia, se dio por válida la posición del empleado, quien había considerado injustificada la ruptura del vínculo y había iniciado acciones legales en busca del reconocimiento de sus derechos vulnerados.
El fallo refuerza la necesidad de que las empresas actúen con responsabilidad, transparencia y apego a las garantías constitucionales al momento de adoptar decisiones disciplinarias. La ausencia de fundamentos claros no solo debilita cualquier intento de despido con causa, sino que puede implicar una condena judicial con costas e indemnizaciones para el empleador.
Este caso, publicado inicialmente por el portal especializado Surtidores, marca un precedente relevante en materia de derecho laboral y pone en el centro de la escena la importancia de respetar los derechos de los trabajadores incluso en contextos conflictivos.
