
Gremiales | 14 de octubre
Cristian Jerónimo suma apoyos y reclama una CGT conducida por dirigentes “con las convicciones suficientes para saber qué intereses representan”

El secretario general del Sindicato de Empleados del Vidrio (SEIVARA), Cristian Jerónimo, volvió a posicionarse como uno de los nombres con más peso de cara a la renovación de autoridades de la CGT, prevista para el 5 de noviembre. En medio de las negociaciones y los reacomodamientos internos, el dirigente pidió una conducción “con convicciones y claridad sobre qué intereses representan”.
“No nos sobra nadie”, remarcó Jerónimo, quien articula un espacio que busca reunir a gremios que quedaron huérfanos tras la disolución del Frente Sindical para el Modelo Nacional y del SEMUN, junto a sindicatos independientes. La idea —explicó— es construir una alternativa “federal, amplia y con vocación de ofensiva institucional”.
Durante una entrevista en Azopardo Stream, Jerónimo cuestionó duramente las políticas económicas de los gobiernos liberales y de derecha:
“El problema de la Argentina no es de los trabajadores ni de los sindicatos. Es el fracaso constante de gobiernos que se entregan a los poderes de turno, endeudan al país y entregan nuestros recursos naturales”, sostuvo.
El dirigente planteó la necesidad de una CGT más activa en la agenda nacional y en sintonía con los debates internacionales sobre derechos laborales:
“En el mundo se discute la reducción de la jornada laboral y el reparto de las ganancias de las empresas. Acá, en cambio, nos vienen a correr con que los trabajadores tienen que pagar Ganancias”.
De buena relación con Gerardo Martínez (UOCRA) y Andrés Rodríguez (UPCN), Jerónimo encabeza un proceso de diálogo con distintos espacios sindicales para construir una síntesis de unidad más que un liderazgo personal.
“Yo no creo en los proyectos individuales. Si mi nombre aporta a la unidad, asumiré el desafío, pero debe ser en una construcción colectiva y federal”, remarcó.
Respecto de las tensiones internas por el formato de conducción —ya sea un unicato o un triunvirato—, Jerónimo sostuvo que lo esencial es la representación genuina de los intereses obreros:
“Lo importante es que los compañeros que se sienten en la conducción de la CGT tengan las convicciones suficientes para saber a quiénes representan, tanto frente a los trabajadores como ante la sociedad”.
Finalmente, llamó a dejar atrás las divisiones y a recomponer la representatividad del movimiento obrero organizado:
“Nos tenemos que dar el trabajo de reconstruir el federalismo sindical y ampliar los debates. A algunos que hoy no están, el día de mañana los vamos a extrañar”, concluyó.
