A partir del próximo lunes 2 de septiembre, los peajes de las autopistas Panamericana y del Acceso Oeste experimentarán un incremento del 5%. Esta actualización, oficializada a través del Boletín Oficial en la madrugada del viernes, será la cuarta de este tipo en lo que va del año y estará vigente hasta el 31 de diciembre. Este aumento se suma a la serie de ajustes tarifarios mensuales implementados por el Gobierno Nacional, en un contexto económico en el que el poder adquisitivo de los argentinos sigue sin cambios significativos.

El nuevo cuadro tarifario para las autopistas Acceso Norte (Panamericana) y Acceso Oeste, que abarca desde 300 hasta 3.700 pesos, dependerá de la categoría del vehículo, el horario de circulación y la modalidad de pago. En horario pico, el costo para un vehículo normal será de 800 pesos en Pago Manual y 734,7 pesos en Pago Automático. Fuera de los horarios pico, las tarifas se reducirán a 700 pesos en Pago Manual y 312,25 pesos en Pago Automático.

La Dirección Nacional de Vialidad (DNV) ha señalado que las tarifas se redondearán a múltiplos de 100 pesos para simplificar el proceso de cobro. Este ajuste tarifario tiene como objetivo evitar desajustes que podrían afectar la calidad de los servicios y las obras en los corredores viales.

Esta nueva subida en los peajes sigue a la reciente actualización de tarifas en el Corredor Vial N°18, que conecta Argentina con Uruguay y Brasil, así como en la Autopista Ricchieri. En el caso del Corredor Vial N°18, los precios oscilan entre 350 y 5.200 pesos, dependiendo de la estación de peaje y la forma de pago. Para la Autopista Ricchieri, los valores parten desde los 450 pesos, con un máximo de 5.300 pesos.

Además, el viernes también se oficializó un incremento en el impuesto a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono, lo que resultará en un aumento aproximado del 3% en el precio de las naftas y el gasoil. Con este ajuste, todas las variedades de combustible en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires superarán los 1.000 pesos por litro.

Estos ajustes en tarifas y precios de combustibles se enmarcan dentro de un contexto de continuas actualizaciones tarifarias y económicas, que buscan equilibrar la gestión de infraestructura vial y los costos asociados al mantenimiento de las autopistas en el país.